Kooza del Cirque du Soleil más que circo es una poesía
La compañía ofreció un grandioso estreno ante los medios de comunicación e invitados especiales con su espectáculo Kooza, realizado bajo la gran carpa blanca, ubicada ahora en las inmediaciones de Plaza Patria, el cual marca otro hito para el Cirque du Soleil.
Ante mil 500 invitados especiales y después de dos largos años de pausa, la compañía de circo dio la apertura oficial con su primer función en tierras tapatías y en punto de las 21:25, las luces se apagaron y la magia invadió el recinto donde se expuso a un Soleil que ofrece dentro de su historia un regreso a las raíces originales, el cual combina dos tradiciones circenses: la actuación acrobática y el arte del clown.
Kooza que en sánscrito significa cofre demuestra que ser artista circense es una actitud ante la vida y así, se pudo saber, por ejemplo, que contra lo que diría la lógica, los malabaristas que arriesgan su vida en las dobles cuerdas tensadas, en un acto innovador, sin pudor antes y después de subir o bajar de las cuerdas.
Asimismo y tradición en el Soleil, la fórmula del circo sigue siendo la misma, donde se pueden ver trajes elaborados, músicos en vivo y una variedad de coreografías simétricas, que no es extremadamente innovadora en términos de tema o narración general, pero tendrá éxito con los asistentes de todas las edades.
Kooza cuenta la historia de Inocente, un solitario y melancólico personaje que busca su lugar en el mundo, con él abrió la función provocando las primeras emociones.
Una mezcla de risa y en algunos momentos empatía. El personaje despertó sentimientos variados, siendo él como hilo conductor cada personaje fue saliendo a escena, uno más sorprendente o hilarante que el anterior, dentro de un mundo electrizante lleno de sorpresas, emociones, audacia e importancia total.
Sin duda que los actores que dieron vida a los personajes humorísticos también merecen ser destacados, quienes lograban sacar carcajadas sin necesidad de hablar, ellos son: el Trickster, el Inocente, el Rey que representa al Rey de los tontos, a quien siempre se le ve acompañado de sus compañeros, los payasos Heimloss, quien está en cargo de toda la maquinaria en Kooza, y un Perro Malo.
Sin duda que no se puede dejar de admirar el físico, la resistencia y la valentía del solista que realizó una asombrosa parada de manos sobre una torre de sillas inquebrantables, además de tres contorsionistas muy flexibles, un acto de trapecio oscilante con tentadoras giros triples y un acto de doble cuerda floja.
No hay duda en la mente de nadie de que Kooza presenta la oportunidad de admirar y ver en acción a algunos de los artistas de circo más hábiles del mundo.
La gama de disfraces es variada en temas con tonos tenues agradables a la vista, caras de calaveras a lo largo del espectáculo, asimismo destaca el equipo de músicos en vivo, incluidos dos cantantes, que interpretan números dinámicos de canciones que destacan en cada acto.
Realmente hay algunos actos de circo notables que se exhiben en Kooza, como el punto culminante principal, la Rueda de la Muerte, interpretada con gallardía y una despreocupación por un dúo de ágiles acróbatas que parecen estar corriendo más rápido, y donde su formar de saltar en la cuerda al mismo tiempo que se lanzan libremente por encima y dentro de la estructura cíclica giratoria.Cabe destacar que Kooza está dirigido a entretener a toda la familia, pero en ciertos momentos se tienen ruidos fuertes y oscuridad que se usan a lo largo del espectáculo pueden asustar a algunos niños, sin embargo, son los que más disfrutaron del primer show presentado en Guadalajara.
Al final del espectáculo el público emitió una espontánea ovación de pie, prueba irrevocable de lo complacido que quedó, así el Circo del Sol dijo presente y se hizo sentir.